Blogs

RSS

Casi todo el mundo tiene en su retina la imagen de un perro guía acompañando a una persona ciega, trabajando para mejorar la autonomía personal, la seguridad y la capacidad de movimientos de su amo. Pocos sin embargo se preguntan qué ocurre cuando estos animales concluyen su “vida laboral”, que suele ser cuando superan los diez años. Se han ganado una buena jubilación pero, en ocasiones, las personas ciegas –que suelen optar por otro perro- no pueden quedárselo por no contar con espacio para uno o varios perros, por vivir solos o por cualquier otro motivo.

Vuelven entonces a la Escuela del Perro Guía de la ONCE, a la residencia para perros jubilados, donde se abre la opción de la adopción. En muchas ocasiones, son las familias que los han criado como cachorros quienes se ofrecen, pero en otras muchas, surgen iniciativas curiosas que deben ser conocidas.

Cuca es una labradora de pelaje claro que hace ya casi dos años convive con personas mayores en la residencia San Blas de Fabero, en León. Después de trabajar como guía de una persona ciega, esta perra se ha ganado su derecho al descanso pero, no a un descanso más. Cuca es la alegría de esta residencia leonesa, que ha encontrado en la perra una iniciativa de gran interés: convive con trece personas mayores y se ha convertido en el centro de la casa.

Para ella son las caricias y los cariños de todos pero, ella, una perra muy educada y acostumbrada a estar rodeada de personas, da mucho a cambio: compañía, entretenimiento, y un “especial sentimiento con todos”, a juzgar por lo que dice María José Tejera, gerente del centro e impulsora de la idea. “Teníamos claro que esto sólo lo podíamos hacer con un perro muy especial, pero no como una terapia, sino sinténdola como uno más de la familia. Y creemos que se ha conseguido a juzgar por su comportamiento: cuando alguien se aisla en su habitación se acerca a buscarlo”, ha contado en una entrevista al Diario de León.

Los mayores han encontrado en Cuca una actividad más en su día a día. Aseguran los técnicos de la residencia que ha crecido su sentimiento de sentirse acompañados; que aquellos a quienes no apetecía salir, ahora lo hacen. Y hasta han cambiado los roles: mientras antes las personas mayores eran el objetivo de los cuidados, ahora también son ellas quienes se ocupan de cuidarla, peinarla, darle de comer, sacarla a pasear.... Y todo ello ha supuesto mejoras en el bienestar físico de estas personas (pasean con la perra); en la motricidad fina (la peinan o la acarician); e incluso en las aptitudes cognitivas (recuerdan que hay que darla comida o sacarla).

¡Toda una experiencia en torno a nuestra gran protagonista: Cuca, una perra jubilada de la ONCE!

Hay muchos perros guía jubilados iguales esperando que tú seas parte de su nueva etapa de vida.  ¡Anímate, te espera en la FOPG!

Cuca en la residencia San Blas de Fabero (León) – Un repor de CyL TV

 

Categorias: Perros guía

España se convertirá en breve en el primer país de la Unión Europa y de toda Europa en ratificar el Tratado de Marrakech, acuerdo que permite a las personas ciegas el libre intercambio de libros sin tener problemas de derechos de autor.

Y esto, tras la buenísima noticia de que el Consejo de Ministrios del pasado viernes 22 de mayo haya decidido que nuestro país se adhiera al citado Tratado, una demanda que la ONCE ha venido exigiendo desde hace años y por la que ha trabajado con insistencia en todos los ámbitos posibles.

Gracias a ello, y a la colaboración de muchas organizaciones de carácter internacional, como la Unión Mundial de Ciegos, Naciones Unidas fue tomando conciencia de la importancia de evitar que la legislación protectora de los derechos de propiedad intelectual constituya un obstáculo discriminatorio que dificulte el acceso a materiales culturales por parte de las personas con discapacidad, y lograr un equilibrio entre los derechos de unos a acceder a la lectura y los otros, a que su trabajo sea reconocido.

La OMPI, agencia especializada de Naciones Unidas con competencia en la administración de los asuntos de la propiedad intelectual, convocó en 2013 una Conferencia Diplomática en Marrakech en la cual se adoptó el Tratado para facilitar el acceso a las obras publicadas a las personas ciegas, con discapacidad visual o con otras dificultades para acceder al texto impreso. Eso sí, debería ser ratificado al menos por 20 países para poder entrar en vigor.

España, y gran parte de esta labor se debe a la ONCE, ha sido pionera en el campo de la protección a las personas ciegas o con discapacidad visual y un referente para otros países, por lo que la adhesión a este instrumento por parte de nuestro país reviste especial importancia para consolidar y dar visibilidad a este compromiso, según reconoce oficialmente el Gobierno español.

Porque leer es un derecho pero, en la actualidad, no todas las personas tienen acceso a libros ni a otros materiales de lectura. De hecho, más del 90% de los materiales que se publican son inaccesibles para las personas que no pueden leer o utilizar la letra impresa. De ahí la necesidad de asegurar su reproducción en formatos accesibles, tales como braille, macrotipo y audio, que actualmente no están permitidas por muchos países, amparándose en los derechos de autor y dejando fuera de esa opción a más de 300 millones de personas ciegas o con discapacidad visual severa.

Y esto es muy grave, especialmente para el acceso a la educación de muchas personas ciegas, que ven así mermadas sus capacidades y posibilidades de inclusión real y efectiva en las sociedades en las que se desenvuelven, así como en el acceso a la cultura y la información.

Es preciso seguir impulsando que el Tratado sea firmado por más estados y pueda ser aplicado. Por ello, la ONCE seguirá trabajando en esta línea con cuantas instituciones y organizaciones le sea posible y, muy especialmente, tratando de que la Unión Europea en pleno se sume a esa iniciativa, que no puede ser más fiel a cubrir una necesidad largamente ansiada por las personas ciegas de todo el mundo.

Con el Tratado de Marrakech en vigor, las personas ciegas y sus organizaciones tendrán la capacidad legal de producir libros en formato accesible sin el permiso expreso de los poseedores de sus derechos (autor y/o editor, entre otros), lo que facilitará su acceso a los mismos. Y, por otra parte, se permitirá a estas personas importar y exportar obras en formatos accesibles con el resultado de que se evitará la duplicidad de producción en distintos países, crecerá el número de libros en formatos accesibles que viajan de un país a otro, con un marco legal que ofrezca todas las garantías para todas las partes, y el acceso a la lectura y la información por parte de las personas ciegas será una realidad ahora inexistente en muchos lugares.

Desafortunadamente, hasta el momento presente, sólo 8 países han ratificado el Tratado (Argentina, El Salvador, Emiratos Árabes Unidos, India, Mali, Paraguay, Singapur y Uruguay); sin embargo, serán necesarias 20 ratificaciones para que entre en vigor.

Desde la ONCE seguiremos trabajando para su pronta ratificación.

La ONCE en la Conferencia Diplomática de Marrakech

Fuente: OMPI

 

Categorias: Accesibilidad

¿Cómo explicar que algo que se ha convertido en imprescindible para el desarrollo de las actividades cotidianas de la sociedad, de todas las personas, pueda ser a la vez la más útil de las herramientas de las que disponemos y la barrera más difícil de superar? 

¿Cómo entender que podamos ver el tiempo que hará mañana al otro lado del mundo y algunas personas no consigan ver el saldo de su cuenta bancaria?

Cuando Internet se convirtió con rotundidad en la apuesta más clara de difusión de información y servicios, la ONCE no quiso quedarse atrás y, en 1996, registró el dominio once.es y salió a internet con www.once.es para dar a conocer a todos el mundo de los servicios sociales para personas ciegas y con otra discapacidad que nace, principalmente, de la gestión del juego responsable.

Internet empezó a crecer y crecer, y las empresas ofrecían sus productos y servicios a través de un medio al que se podía acceder desde casa o desde los lugares de trabajo, interconectando millones de posibles vendedores y compradores. Al mismo tiempo nacían los foros, los chats, las listas de difusión y su evolución hacia lo que hoy conocemos como ‘redes sociales’.

Pero Internet se olvidó de aquellos que no podían ver la pantalla,  manejar un ratón, u oír lo que decían los vídeos o archivos de sonido; en definitiva, de todos aquellos que, por sus condiciones personales, no tenían las habilidades físicas o intelectuales para utilizar determinada tecnología.

También se olvidó de aquellos con mayores dificultades para desplazarse a un centro comercial o de los que tenían problemas de comunicación oral, todos cayeron en una profunda "brecha digital".

Esta discriminación se puso de manifiesto, aunque tardíamente, en 1994. El propio creador de Internet,  Tim Berners-Lee, fundó el World Wide Web Consortium (W3C) en el Massachusetts Institute of Technology (MIT) para hacer los sitios lo más accesibles posible. Los desarrolladores de contenidos disponen así de las técnicas más adecuadas en las distintas tecnologías que van surgiendo en esta red, y se establece que los sitios web cumplan unos estándares obligatorios que impidan que cada vez sean menos quienes se vean abocados a esa brecha.

Afortunadamente, la ONCE sigue desde siempre las recomendaciones del W3C y las personas ciegas pueden descargar libros digitales a través de internet, buscar información interna de la propia organización, y sus trabajadores pueden hacer gestiones laborales a través del portal del empleado.

Aunque es justo reconocer que hemos avanzado bastante, aún queda mucho por hacer. La accesibilidad a los contenidos no está todavía en la conciencia de todos, y seguimos teniendo que depender demasiadas veces de que alguien sin problemas sensoriales nos ayude a buscar una información o a comprar algo a través de internet.

Internet sigue creciendo, y normalizar que nos incluya a todos haría más humana esta red virtual.

Con motivo del Día de Internet la ONCE ha lanzado un mensaje en esta línea, volviendo a incidir en la contradicción que vivimos: todo el mundo tiene móvil y casi todos utilizan aplicaciones para hacer la vida más fácil, pero la mayoría de ellas no son accesibles para las personas con discapacidad.

Y es posible. Las páginas web de la ONCE y su Fundación lo demuestran cada día. Sí se puede y así lo han reconocido recientemente con motivo del Día de Internet a varias organizaciones –entre ellas a la ONCE- que han considerado vital informar a todos y permitir que todos puedan beneficiarse de sus productos y servicios.

En enero se cumplirán 207 años desde el nacimiento de Louis Braille, que con su lenguaje de lectoescritura abrió a los ciegos las puertas del conocimiento. No las cerremos ahora, que lo tenemos además mucho más fácil.

Categorias: Accesibilidad

“El trabajo más bonito que hay”, por Javier Gutiérrez Sánchez

¿Qué hace un ingeniero  agrónomo como mediador de  personas sordociegas?

He tenido que contestar tantas veces a esta pregunta, que la respuesta me sale de carrerilla. Nunca  pensé que aquel comentario que me realizó mi hermano, prácticamente  en broma, cambiaría mi vida profesional. Me dijo que necesitaban una persona para hacer apoyos en el colegio de la ONCE en Madrid para trabajar con niños sordociegos los fines de semana. Yo hasta entonces sólo le había oído hablar de personas sordociegas, pero no me podía hacer una idea de todo lo que rodea a este mundo.

Desde entonces  fui compatibilizando mis estudios de Ingeniero Agrónomo con estos apoyos de fin de semana. Luego, alguna sustitución por la baja de algún compañero y así durante varios años. Esto me permitió ir formándome, conocer las necesidades de las personas sordociegas, cómo trabajar dentro del aula, cómo mejorar todas las habilidades de la vida diaria... toda una experiencia que ahora, como coordinador técnico de la Fundación ONCE para la Atención a Personas con Sordoceguera (FOAPS), me gustaría que tuvieran los mediadores que empiezan.

En ese tiempo compaginaba mis estudios con estas colaboraciones hasta que surgió la oportunidad de trabajar como mediador de personas sordociegas para Asocide. Una oportunidad para aplicar todo lo que había aprendido pero ahora en otro centro (Pilar Gómez me acabó convenciendo y se lo agradezco).

El trabajo como mediador surgió porque terminaban su etapa educativa en el Colegio de la ONCE cinco niños sordociegos que continuaban su formación en un centro en Ávila. Yo conocía a estos niños porque había trabajado con ellos, tanto en la residencia, como en las aulas. El reto era grande: salir de trabajar en una situación casi idílica en el centro a pasar a la realidad cotidiana de otro lugar. El inicio fue duro: pasamos de un trabajo con una ratio adecuada para poder trabajar con los chicos, con personal formado y donde todo el mundo que trabajaba con los niños conocía lengua de signos, a un centro donde estaba todo por hacer. Tuve que organizar por completo un aula para ellos con calendarios de anticipación, materiales, fichas, actividades, enseñar a todo el personal a comunicarse con los niños sordociegos, mostrarles los desplazamientos, trabajar con los profesores y cuidadores... El trabajo no tenía fin, incluso cuando terminaba la jornada laboral me encontraba frente a la tele recortando, pegando, montando; recogía todos los materiales que encontraba para poder aprovecharlos y adaptarlos, y hasta el maletero de mi coche pasó a ser un almacén.

Y sin embargo, esta etapa me ayudó mucho a desarrollar la creatividad a la hora de preparar materiales adaptados para trabajar con personas sordociegas, ya que hay muy pocas cosas adaptadas. Durante estos años, trabajé cuatro días en Ávila y uno en el centro de Madrid, para mantener la coordinación y seguir aprendiendo con mis compañeros, intercambiando experiencias. De ahí surgió la iniciativa de crear un grupo de ocio para luchar contra el aislamiento de las personas sordociegas, que se agrava aún más si tienen discapacidad intelectual.

El aula en el centro de Ávila comenzó a rodar con mucho esfuerzo. Poco a poco empecé a trabajar con otros usuarios, no sólo los chicos y abrimos nuestra colaboración y trabajo cotidiano a centros de educación especial, colegios, institutos, universidades, residencias, centros de día, centros ocupacionales, domicilios...  Pasaron varios años y los mediadores de Asocide pasamos a formar parte de FOAPS. Otros pocos años después me ofrecieron la oportunidad de asumir la coordinación técnica de FOAPS. Y aquí estoy, echando mucho de menos la intervención directa, pero ayudando en la medida de lo posible a los mediadores y a las personas sordociegas.

El trabajo como mediador no se aprende en la escuela de mediadores, porque no la hay. Nuestro trabajo se aprende con la experiencia, la formación constante, la puesta en común con el resto de mediadores, y algo que repito muchas veces: ofreciendo a la persona sordociega lo que nos gustaría que nos facilitaran a nosotros si fuésemos sordociegos.

Y aquí estoy, todavía contestando muchas veces ¿Qué hace un ingeniero agrónomo como coordinador técnico de FOAPS? Es fácil: trabajar con personas sordociegas es el trabajo más bonito que hay.

 

 

 

Categorias: Sordociegos

Estos días se conmemoran 50 años desde el nacimiento de la Asocación Española de Anunciantes (AEA), con varios actos muy interesantes y un recorrido por el recuerdo de las campañas publicitarias que nos han marcado a todos. Justo es reconocer - y así lo han hecho también los anunciantes reunidos precisamente en una de las sedes de la ONCE (el antiguo colegio del Paseo de la Habana en Madrid)- que la Organización ha aportado mucho a este sector, con realidades publicitarias atrevidas, novedosas y, siempre, muy respetuosas e impulsoras de la buena imagen de las personas con discapacidad.

Lejos en el tiempo quedan campañas como “La casa encantada”, “Preparados, listos, ya”, o “Seas como seas, seas quien seas, bienvenido”, con un enfoque rotundamente social, junto con otras como “La Ilusión de todos los días”, el lanzamiento del “Cuponazo” con aquella “cola” que mantuvo en vilo a la ciudadanía española, o el “Tú me das cremita, yo te doy cremita” de un sorteo extraordinario de verano que, junto con otras muchas, forman parte ya de la historia con mayúsculas de la publicidad en España.

En esa línea de innovación publicitaria, las campañas de la ONCE y su Fundación tratan de incorporar siempre que es posible la vertiente social de la labor que la Organización lleva desarrollando ya más de 76 años y que, por otra parte, es su razón de ser.

Mención en este sentido merece la nueva línea de comunicación publicitaria que se ha puesto en marcha recientemente, y que bajo el lema “¿Cúal es tu papel?” consigue ensamblar el espíritu social de la Organización; la necesidad de mantener su inversión, también social, con ingresos que proceden mayoritariamente de la venta del cupón de la ONCE y otras modalidades de juego; y la llamada de agradecimiento y también de necesaria colaboración a la sociedad española, cuya solidaridad hace posible cada día que la ONCE siga generando oportunidades de vida para las personas ciegas y/o con otra discapacidad.

La campaña, que se repetirá durante el año en los medios de comunicación y a la que se sumará también la cartelería de los quioscos de la ONCE, tiene como objetivo que el ciudadano se sienta partícipe de que, cuando compra los productos de juego de la Organización, está colaborando con una labor social de importancia y, además, que su acción es clave y marca de su compromiso con la sociedad.

“¿Cuál es tu papel?” constituye en sí un agradecimiento a quienes, día tras día, en ocasiones sin saberlo, juegan un papel primordial en esta gran cadena de solidaridad que es la ONCE y su Fundación, que recoge en la calle, a través de 20.000 agentes vendedores, el apoyo y la confianza de la ciudadanía para convertirlo en más solidaridad, dirigida a las personas con discapacidad en forma, especialmente, de educación, formación continua, oportunidades de empleo y accesibilidad en todos los ámbitos de la vida.

“¿Cuál es tu papel?” es además una llamada de atención a la ciudadanía sobre la existencia en España de un modelo de cobertura social sin parangón en el mundo: la ONCE y su Fundación. Un sistema que, apoyado en la gestión responsable del juego, es capaz de generar cobertura social para más de 72.000 personas ciegas y empleo directo para otras 70.000 personas más, la mayoría de ellas, con discapacidad.

“¿Cuál es tu papel?” es en definitiva, un cariñoso recordatorio para quienes se sienten parte importante del papel que juega y quiere jugar la ONCE en el futuro y también una llamada a quienes pueden encontrar en la Organización otra forma solidaria de contribuir a hacer una sociedad cada vez más inclusiva, cada vez mejor para todos.

En España hay cuatro millones de personas con discapacidad que, además de contar con sus derechos y la cobertura que le otorgan las administraciones públicas, encuentra en el movimiento asociativo -del que la ONCE se siente parte muy activa-, otra forma de entender, otra forma de comprender y otra forma de escribir cada día un futuro que nos compromete a todos. Por eso no dudamos en preguntar a todos: ¿Cuál es tu papel?

 

Anuncio sobre educación de la campaña ¿Cuál es tu papel?

 

Categorias: Publicidad

Publicador de contenidos

Publicador de contenidos

Síguenos en:

Contenido - Acerca de la ONCE

Acerca de la ONCE

El compromiso de la ONCE es hacer realidad las ilusiones de miles de personas con discapacidad y de sus familias. Y todo ello (educación, empleo, accesibilidad, nuevas tecnologías, ocio, deporte...) lo logramos gracias a la solidaridad de la sociedad española que, día a día, año tras año, confía en nosotros, acercándose a los vendedores de la Organización y al resto de establecimientos autorizados para la venta de nuestros productos, conocedores de nuestra labor, sabiendo que, si nos necesita, en la ONCE y su Fundación, estaremos a su lado.

Y todo ello lo hacemos con la garantía de ser la única marca en España con el sello de Juego Responsable, con las certificaciones nacionales e internacionales más severas, y que sólo la ONCE ha alcanzado en el ámbito del juego, un aval más de la integridad de nuestra gestión.

Para más información: www.once.es